Durante la etapa en la que se tenga la ortodoncia hay que cuidar más que nunca la salud bucal, hay que cepillarse los dientes después de cada comida con un cepillo con cerdas suaves y especialmente diseñado para brackets.
Estos cepillos suelen tener una hilera más corta la cual permite limpiar los brackets y la superficie del diente al mismo tiempo. También existe otro cepillo especial para limpiar las zonas entre los brackets.
Es recomendable limpiar los dientes con seda dental diariamente, hay hilos dentales diseñados para facilitar la limpieza de las personas con ortodoncia que tienen un extremo más rígido.
No hay que abusar de la ingestión de azúcar o de carbohidratos ya que si quedan restos podrían convertirse en ácidos y ser perjudiciales. Hay que evitar que se acumule placa alrededor de los brackets porque podría haber descalcificaciones.
Evitar alimentos pegajosos o excesivamente duros porque podrían ser muy difíciles de retirar de los brackets o incluso tener que romper o interrumpir el tratamiento.
Asimismo debería evitar comer chicles, palomitas de maíz, almendras o hielo. En cuanto a las manzanas o verduras más duras pueden comerse pero es mejor cortarlas en trozos pequeños para evitar la presión y así no dañar los aparatos.
No hay que introducir objetos en la boca como palillos, lapiceros o similares porque si se tiene la costumbre de morderlos, esto podría retrasar el tratamiento y ser contraproducente.
Si se está utilizando aparatos removibles, que son los retenedores, deben lavarse con frecuencia pero no someterlos a calor. Si se ensucian hay que llevarlos a la clínica para que se esterilicen.